¿Cómo aliviar el dolor de la menstruación?
La mayoría de las mujeres suele experimentar cólicos antes, durante o incluso unos días después de su periodo menstrual. Los cólicos son causados por la segregación de la hormona prostagladina que se extiende por todo el útero y hace que se contraiga. La contracción del útero es lo que genera el dolor dependiendo de la intensidad con la que lo haga.
Algunas de las medidas para aliviar o reducir los cólicos son:
- Aplicar calor en el abdomen. puedes colocar alguna prenda humedecida con agua caliente o utilizar una bolsa o manta térmica especial. Hay algunas tiendas naturistas y ecológicas que venden almohadillas de semillas que se meten al microondas para elevar un poco su temperatura y colocarse en el vientre.
- Recostarte con las piernas elevadas y recargadas en una pared. Esta posición te ayudará a relajar la tensión muscular.
- Realizar ejercicio de forma regular. Si ya lo prácticas es importante que no dejes de realizarlo estos días, ya que hacer ejercicio produce endorfinas -analgésico natural- que pueden hacer que el dolor sea menor.
- Puedes recurrir a los medicamentos. Las opciones que puedes considerar son los antiinflamatorios como el ibuprofeno o paracetamol. Si el dolor es tanto que esto no ayuda, es momento de acudir con tu médico o ginecólogo.
- Y finalmente, puedes recurrir a una práctica de autoerotismo o masturbación, que además te servirá para explorar tu cuerpo y ayudarte a conocerlo mejor. Un buen orgasmo te ayudará a aliviar el dolor porque genera endorfinas, ayuda a aliviar la tensión muscular y los espasmos del útero se vuelven más ligeros.
De igual forma, es importante evitar toda esta carga “negativa” que suele acompañar a nuestro periodo menstrual, es decir, percibirlo como si fuese algo sucio, que causa asco, que es terrible, ya que esto no nos permitirá ver todos los beneficios que este puede ofrecerte; por ejemplo: la menstruación sirve como un proceso de depuración para eliminar algunas toxinas que tu cuerpo ya no necesita.
Cabe mencionar que no hay que confundir los cólicos con la dismenorrea, ya que está suele ser una patología y requiere de un diagnóstico. La dismenorrea se caracteriza por provocar un dolor parecido al de un retortijón (o calambre), pero más intenso, y puede llegar a acompañarse de náuseas. Para un adecuado diagnóstico se debe tener en cuenta la historia clínica, características de tus ciclos menstruales; en ocasiones suele estar acompañado de náuseas, vómito e incluso diarrea.
Si el dolor es tal que necesitas quedarte en cama por un par de días cada ciclo menstrual o te impide hacer tus actividades cotidianas, te recomendamos acudir al área ginecológica para hacerte una revisión general. No olvides que no es necesario que seas mayor de edad para acudir al ginecólogo, pero sí es importante que sí eres menor de edad, una persona adulta y de confianza te acompañe.
Referencias:
Centro Nacional de Excelencia Tecnológica en Salud (CENETEC). Diagnóstico y tratamiento de Dismenorrea en el primer, segundo y tercer nivel de atención Disponible en: www.cenetec.salud.gob.mx
Chaby L. (2004) La adolescente y su cuerpo. 4° edición. Siglo veintiuno: México